De la Resolana al Postigo
Y del arco a la espadaña
De esa Esperanza que habita
Por San Luis y la muralla
Llegó mi alma sedienta
Para beber de tus aguas
Como manantial que fluye
del embrujo de tu cara
Y prendido quede en tu pena
En tu juventud soberana
En la niñez dibujada
Del perfil de tu cara
He venido desde el arco
Para encontrar Esperanza
Y me encontré con tu nombre
Y me abriste tu casa
Me ensañaste un tesoro
Bajo tu manto de malla
Y caminé saciado
De tu divina enseñanza
Para enseñarme a una niña
Que Guadalupe se llama
En el arenal yo me pierdo
Buscando tus aguas
Y me enseñaste un camino
Desde el postigo hasta el arco
Que acabo en la Resolana
Siempre de verde, de verde Esperanza
Y consegui verte de frente
De perfil y de espaldas
Para admirarte madre
De San Gil su Esperanza
Que te espera y te atrapa
Te conquista y te abraza
Grandeza de Reina
Sencillez de las Aguas
Macarena del cielo
Guadalupe del alma
Hoy te siento cerca
Y a la vez tan lejana
Que por tus arcos quiero
Cruzar yo mañana
Para decirte mucho
Para esperar tu mirada
Para beber de tu fuente
Para contemplar tu cara
Para perderme contigo
En el postigo y las aguas
En la muralla y el cielo
Que le llaman Resolana.
Macarena mi madre
Guadalupe la llaman
Dos nombres que guardo
En el pellizco del alma
En el arco del cielo
Por donde pasa tu gracia
Una madre, dos nombres
Donde mi fe descansa
Donde descansan mis penas
Mis fatigas y rabia
Donde me elevas al cielo
Desde bequer a parras
Dos de mayo y te busco
Y de nuevo me llamas
Aquí estoy Guadalupe
Aquí estoy soberana
Aquí estoy Macarena
Y sin ti, no soy nada
