Desde esta humilde ventana, mi más sincera felicitación, por estar manteniendo la tradición de instalar el Belén, fomentando que sea un referente nuestra ciudad, nunca dejéis de sorprender pero este año no hay palabras.
Es emocionante ver cada día las colas de personas a las puertas del casino, como jamás había visto en nuestra ciudad.
Y todo sin perder el sentido bíblico y espiritual que da sentido a nuestra verdadera Navidad.