Ojalá y pudiera quedarse en ese enclave para su veneracion, aunque de momento parece ser que será solo durante una semana
De momento podemos disfrutar de esta estampa conjunta de Madre e hijo en el rincón penitencial de la Iglesia durante unos días.
Ojalá y sea reconsiderada la ubicación para no tenerla que ver nunca más tras la cristalera de un escaparate y poderla honrar y venerar como merece dicha talla, ya que la devocion que se le profesa en esta ciudad es bien reconocida
