Sin darnos cuenta, hemos vuelto a
completar las hojas de un calendario que nos avisa que estamos a las puertas de
un tiempo nuevo, ese que los cristianos celebramos y vivimos el Nacimiento del
Hijo de Dios, que da sentido a nuestra vida.
Sí, de nuevo es Navidad en
nuestro devenir diario, aunque desgraciadamente en nuestra ciudad no lo
parezca, ya que poco a poco se van escondiendo símbolos religiosos que parece
ser que tanto daño hacen a todos aquellos que viven lejos de la realidad de un país
mayoritariamente católico y con ellos luces y demás elementos navideños, que no
solamente decoran, sino que propician un ambiente propio para que el pequeño
comercio y la hostelería de un respiro de estos últimos años aguantando el
envite de la crisis, pero eso a algunos les importa bien poco, que unas cosas
lleven a otra y lejos de presumir de ciudad, tengamos una ciudad gris y sombría
que poco podrá fomentar el turismo en estas fechas.
Pero lejos de este panorama de
engaño en el que estamos viviendo, cuando fuimos utilizados en todos los actos
cofrades para arrebañar un puñado de votos por la persona que hoy nos gobierna,
aunque sea desde la sombra, pues eran pocos a los que faltaba, cuando sigue
figurando como hermana en la nómina de alguna hermandad, la cuál comparto con
la misma y que ella misma siempre alzó como bandera y hoy rechaza genéricamente
en un conjunto de ideas ideológicas contrarias a la religión para dar sensación
de progre, sin darse cuenta, que cuando se gobierna se hace para todos y cada
uno de las personas que componen esta ciudad y que es Navidad para todo el orbe
cristiano y se debe respetar las tradiciones que han dado sentido a nuestra
historia.
Por eso debemos estar alegres,
pues aunque no corran tiempos fáciles, debemos seguir luchando y trabajando por
mantener nuestras tradiciones y de nuevo es Navidad, aunque en nuestra ciudad
no lo parezca, al menos que lo veamos en nuestras vidas y en nuestro espíritu
ya que si no, pensaran que ganaron una partida ante nuestro pasivismo y nuestra
comodidad.
Es Navidad, por eso desde esta
humilde ventana donde las imágenes tienen más sentido que las palabras, os
deseo una Feliz Navidad y durante todo este tiempo podréis ver algunos de los
belenes que he podido fotografiar.
Este año, no hemos sido agraciados con ningún premio en
nuestro belén presentado al concurso de escaparates, del cuál aún no han sido
comunicados en ningún medio público y no es por que hubiéramos querido ganar el
famoso metacrilato sin ninguna cuantía económica, sino por la falta de criterio
y objetividad de un jurado que poco o nada conoce del mundo del belén, todo una
tradición artesanal , donde las proporciones y el paisaje, el corcho y el
musgo, junto con la iluminación eléctrica forman ese paisaje que nos traslada al
pueblo de belén y poco o nada se puede comparar con ríos de plata, peanas
visibles, figuras desproporcionadas en su tamaño y un sin fin de mala calidad,
así como edificaciones compradas, más propias de su venta que de su artesanía y
han sido merecedoras de un premio, que poco o nada se refleja con el arte del
belenismo.
En fín , esto es lo que hay y
tendremos que seguir luchando por que no desaparezcan nuestras tradiciones, eso
sí, desde el buen gusto y la buena calidad.
que decepción Pilar, que decepción.
que decepción Pilar, que decepción.
El blog Nazarenos de Luz os desea
Feliz de Reyes