No es oro todo lo que reluce

Una Navidad que lucio sus mejores galas hasta el cuatro de enero.

Vaya desde aquí mi consideración a una ciudad que no es capaz de despertar, no se muy bien los motivos.

Este año, donde por fin vivimos libres de mascarillas y distancias ,volvió la alegría a nuestras calles.

Aprobado, en sus luces

Aprobado en sus belenes, cada año superándose por la Asociación de belenistas,  hermandades,parroquias y escaparates, fieles a mantener una tradición 

El del Casino, mención aparte, por su espectáculo de luz y sonido, originalidad y belleza 

Aprobado Alto en el cartel y el pregón de Navidad organizado por la Asociación de belenistas 

Aprobado en la tarde que Santo Tomás volvió a poner música en la ciudad,  aunque al final alguien no midió los tiempos

SUSPENSO, a las personas incivicas, que las tardes de nochebuena y noche vieja salen a disfrutar, dejando la ciudad hecha un estercolero, la plaza cervantes fue testigo de ello así como los locales de las calles adyacentes 

SUSPENSO, a quien decididiera sustituir a unas 300 personas por música mala enlatado,  dejando nuestras bandas sin salir con el colorido y la alegría que aportan

Cuando no se suspendieron ni el año pasado

SUSPENSO   a la cabalgata más triste y gris que recuerdo, con la ilusión no se esperimimenta,