Un nuevo comienzo

Todo un éxito, la esperada exposición de Luis Fernando Ramírez Mata,ha cerrado sus puertas,

 sin lugar a dudas, ha superado con creces, todo lo esperado, ya que durante los trece días abierta al público, se ha visitado por unas 2500 personas, con una media de 250 visitantes diarios, (datos del museo) amigos, cofrades y curiosos, se han dado cita estos días alrededor de las obras del artista, con una trayectoria de diez años y que nunca se había podido contemplar conjuntamente. Todo ello, unido al buen hacer de las labores de priostía, de camarería con D. Pedro Luis Bazán, de hermandades que han cedido enseres de su patrimonio, como Dolorosa de Santiago, Soledad, Caridad, Flagelación, Rosario de San Julián (Sevilla), Mercedarias de Miguelturra  y colaboraciones anónimas, se ha hecho posible el montaje de la misma.

 Y ahora que todo ha terminado, seguro que espera un nuevo comienzo, pues cuando la imaginería, vuelva  a sus lugares de culto privado, habrá un antes y un después, ya que han sido muchos los que por allí han pasado, se han emocionado  y han visto brillar una nueva Luz, que ha traspasado del umbral del anonimato, a la devoción de muchos, plasmada en una de las más de dos mil estampas repartidas estos días y que sin duda, algún día veremos brillar, como se merece, pero hasta entonces, caminaremos despacio, firmes y seguros, tratando de que nunca se apague su Luz.